En el cristianismo usamos la palabra “protoevangelio” para referirnos a la mención preliminar del evangelio, que consiste en la promesa de que vendría el Ungido de Dios o el Mesías salvador. Encontramos el protoevangelio en Génesis 3, en el contexto de la caída de Adán y Eva. Luego de que ellos siguieron la voz de la serpiente y pecaron contra Dios, el Señor maldijo a la serpiente y declaró el protoevangelio dirigiéndose a ella:
“Pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; él te herirá en la cabeza, y tú lo herirás en el talón”, Génesis 3:15.
Dios prometió así que Cristo —el descendiente de la mujer— acabaría con la serpiente, aunque no sin haber sido herido primero. Esto apunta a que el sufrimiento del Hijo de Dios y su muerte por nosotros, junto a su resurrección victoriosa, representan la derrota de Satanás.
El deseo de la serpiente —arruinar la comunión entre Dios y su creación— queda frustrado por completo para la gloria de Dios (cp. Col. 2:13-15). Apocalipsis 12:9 explica que esta serpiente es Satanás, así que el protoevangelio anticipa la consumación del propósito de Dios en Apocalipsis 19-20: la derrota definitiva del mal y la morada eterna de Dios con Su pueblo en una creación libre de pecado.
En Romanos 16:20, vemos una alusión al protoevangelio cuando Pablo escribe a la iglesia que “el Dios de paz aplastará pronto a Satanás debajo de los pies de ustedes”. El apóstol nos recuerda que, gracias a la victoria de Jesús sobre nuestro adversario, nosotros también somos más que vencedores en Él, sin nada que pueda separarnos de Su amor (Ro. 8:37-39). Los cristianos podemos descansar en que disfrutaremos por siempre lo que Cristo obtuvo para nosotros.
El protoevangelio es una prueba de que la Biblia es una historia en donde Jesús es el verdadero protagonista. Necesitamos ver cómo toda la Escritura se trata de Cristo y cómo en su obra contemplamos la gloria de Dios manifestada en nuestra salvación por amor.
Josué Barrios sirve como Director Editorial en Coalición por el Evangelio. Ha contribuido en varios libros y es el autor de Espiritual y conectado: Cómo usar y entender las redes sociales con sabiduría bíblica. Es licenciado en periodismo y cursa una maestría de estudios teológicos en el Southern Baptist Theological Seminary. Vive con su esposa Arianny y sus hijos en Córdoba, Argentina, y sirve en la Iglesia Bíblica Bautista Crecer como líder de jóvenes. Puedes leerlo en josuebarrios.com, donde su blog es leído por decenas de miles de lectores todos los meses. También puedes seguirlo en Youtube, Instagram, Twitter y Facebook, y suscribirte gratis a su newsletter con contenido exclusivo.
Acerca del Autor
